Mi voz imploraba el saludo de la noche.
Mis latidos saltaron aterrados.
Mi amor odió a cuantos pudo.
No era yo, no era yo, era yo.
Mi voz imploraba el saludo de la noche.
Mis latidos saltaron aterrados.
Mi amor odió a cuantos pudo.
No era yo, no era yo, era yo.