Y tú venías con tus gafas nuevas
y yo esperaba como siempre en tu portal
y el beso al saludarnos recordaba
el sueño que soñábamos soñar

Entonces no entendía que los sueños
son siempre malos, siempre son igual
que los buenos se terminan demasiado pronto
y los malos no terminan de acabarse
al despertar

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s