¡Enamórate, rosa!
Ya estoy enamorada.
Si en verdad lo estuvieras,
no estarías tan blanca.
Yo he visto rosas rojas
amantes del amor
y por enamoradas
ése era su color.
¡Ay! No me digas eso,
que yo por el amor
me puse así de blanca,
pues di hasta mi color.