Has vuelto derramando mi vida por el suelo.
Los años que creí que me alejaban de tu lado
me han llevado al mismo sitio del que me fui.
Las poesías me engañaron,
las estrellas señalaron el lugar en donde estabas,
el refugio del amor donde te escondía de mí.
Has sido lo que fuiste y te he amado como siempre
y he vuelto a estremecerme al darte un beso,
y las fotos que en mi cuarto se resistieron a morir
sonríen y me miran tiernamente
probablemente porque saben que nunca me olvidé de ti.
Has vuelto a deshacer mis noches de vacío en lágrimas.
Has echado por tierra todo lo que aprendí para enterrarte.
Atraviesas las murallas que construí en los años,
en los años en los que menos ganas tenía de vivir.
Me has dejado contando los días para verte.
Me has dejado inventando excusas para no besarte,
para no darte los pocos sueños que entonces no te di.
Has vuelto y sé que no debería
reconciliarme con las cosas que odié cuando nos fuimos
ni escuchar los recuerdos que amordacé cuando me fui
ni envainar las armas que prometí usar contra ti cuando volvieras
ni dejar de pensar y seguir.
Has vuelto y debería ser fuerte
como cuando dejé de verte y aprendí a querer yo solo
y aprendí a hablar a otras chicas que no se parecían a ti.
Ya soy otro pero a tu lado vuelvo a ser el mismo
y siento que fueron inútiles las noches en que aprendí a odiarte,
las noches que dedicaba a recordar cómo me hundiste
y me enseñaste que el amor también fracasa, y tiene fin.
Ya soy otro, probablemente otro.
Tú lo sabes. No te importa.
Sea como sea tú eres otra y no te irás hasta que te apoderes de mí.
Por eso has vuelto, porque ahora sabes
que yo tenía razón cuando decía que el amor era eterno,
cuando te prometía que nos querríamos siempre
y tú te quedabas callada porque no sabías qué decir.
Has vuelto y, ¿sabes lo peor de todo?
Que en el fondo de mi alma sé que debería amar de nuevo
que eres la mujer de mi vida y que jamás encontraré a otra
que cumpla los años el nueve de abril,
pero en lo más hondo de mi pecho
un recuerdo abandonado me dice que no vuelva a amarte
como aquella tarde tan rara en la que te pedí
tu corazón para siempre mientras te daba el mío
sin saber que jamás volvería a mí.
Y es en estas noches, en las que sé que has vuelto,
cuando más ganas tengo de volver a tu lado
cuando menos ganas tengo de volver junto a ti.