Cómo he podido tener tanta suerte
de haber encontrado a mi persona.
Puede que haya alguna más. No creo.
Me pega más que sea ella sola.

Podría haber vivido en otra ciudad.
Podría haberse asustado cuando le dije: «Hola».
Podría haberme oído mal,
haberse pensado que estaba de broma.

Pero no, porque la suerte es distinta
cuando uno encuentra a su persona.
Uno se siente más guapo, más inspirado,
sus tonterías parecen más graciosas.

Y todo lo que parecía no gustarle a ninguna,
ese defecto que parecía espantar a las otras
de repente se vuelve perfecto y demuestra
lo bonitas que son cuando le importan a otro nuestra cosas.

Cómo he podido tener tanta suerte, de verdad.
Hasta me siento mal de haberme quejado tanto hasta ahora.
Y eso que aún pienso que era bastante improbable
entre tantas tristezas encontrar a mi persona.

Un pensamiento en “

  1. Pingback: | Poesías y lágrimas en WordPress.com | Nayeli Guzman

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s